En el aprendizaje de una lengua existen cuatro errores fundamentales que cometemos en la adquisición de esta nueva habilidad y es de suma importancia poder evitarlos con el fin de poder alcanzar la meta propuesta por cada uno y poder desarrollar el lenguaje de forma natural. Por tanto, se han definidos 4 errores:
Utilizar tiempo y esfuerzo excesivo para alcanzar una meta
Gran parte del tiempo tanto los alumnos como los profesores tratan de aprender en exceso materia como vocabulario, verbos, adjetivos, etc., que no tienen todos aplicación en la vida real. Por tanto, cuanto más distancia existe entre lo que uno aprende y la utilidad que se le da en la rutina diaria, lleva a una mayor frustración por parte del estudiante. Por consiguiente, la clave no es la cantidad que estudias, sino cuanto uno aprende y como lo aplica día a día.
Aprender cosas superfluas
Uno error común en la adquisición de la nueva lengua es abarcar demasiadas cosas que en la realidad uno no necesita. Por tanto, aprovecha tu tiempo en temas que sean de tu interés y lo lleves a la práctica diaria, es decir, si tratas de aprenderte todas las frutas y/o verduras y en la práctica solo usas unas pocas aprendes esas y el resto en el tiempo a medida que lo vayas necesitando.
El profesor se lleva todo el crédito
El profesor que está a cargo de tu enseñanza de la nueva lengua sea este nativo o no a menudo es el que más habla en la clase, por ende no permite la interacción de los alumnos perdiendo tiempo valioso que podría ser usado con los estudiantes desde juegos, vocabulario, lectura, escritura, etc., aplicado en el aprendizaje del nuevo idioma.
Teoría en extremo
La práctica hace al maestro, la teoría es importante para entender la gramática y las reglas de la nueva lengua como su cultura, pero es más importante la práctica en clases, la interacción entre los alumnos con el profesor y entre ellos, logrando así vencer el miedo a equivocarse y poder adquirir la nueva lengua de la forma más natural.